¡Muy buenos días!
Te he hablado en otras ocasiones sobre los teléfonos y lo improductivos que son de cara a nuestros proyectos, robándonos tiempo a diestro y siniestro. ¿Y qué pasa con el email? ¿Acaso no nos hace igualmente improductivos? Veamos cual de las dos opciones es la mejor, o al menos la menos mala.
Si quieres contactar conmigo puedes hacerlo en alvaroflecha.com
Nos escuchamos mañana con un nuevo episodio, ¡un saludo!