Durante una tarde aburrida, mientras su hermana está bordando debajo de un árbol, Alicia ve a un conejo blanco, vestido y con un reloj de bolsillo pasando. Ella decide seguirlo por un agujero cuando, de repente, cae muy lejos en un mundo de fantasía poblado por peculiares criaturas antropomorfas. El cuento juega con la lógica, lo que le da popularidad duradera tanto a los adultos como a los niños. Es considerado como uno de los mejores ejemplos del género literario sin sentido. Su narrativa, trama, estructura, personajes e imágenes han sido enormemente influyentes tanto en la cultura popular como en la literatura, especialmente en el género de fantasía.