El Ministerio de Cultura ha iniciado los trámites para declarar la apicultura española Patrimonio Cultural Inmaterial.
Con ello, busca salvaguardar y promover esta tradición. Y supone un reconocimiento al esfuerzo de generaciones de apicultores que han mantenido viva esta práctica, transmitiendo conocimientos y técnicas que enriquecen nuestro patrimonio desde hace miles de años.