La vida puede cambiar en un instante. A veces podemos prepararnos para evitar ciertas consecuencias, pero hay situaciones que escapan a nuestro control, como una emergencia de salud. Fernando Díaz nos cuenta que estaba bien de salud, pero un día se desplomó en su casa. Los paramédicos que lo atendieron advirtieron a su familia que podría no llegar vivo al hospital. En medio de esta desesperante noticia y un diagnóstico complicado, la confianza en Dios de Fernando y su familia fue crucial. En esta entrevista, compartiremos la historia completa con Fernando desde España.