A finales del s.XIX (1893), Fridthof Nansen, explorador, científico y posteriormente diplomático noruego protagonizó una de las más sorprendentes historias de descubrimiento y superación personal de la historia reciente. Su expedición al Polo Norte y los hallazgos científicos que en ella tuvieron lugar sembraron el germen de la oceanografía física moderna y supusieron en su momento un punto de inflexión en el conocimiento de las corrientes marinas.