En la colina de Petřín, en Praga, se encuentra una galería de arte un tanto extraña a la que se puede llegar bajándose en la estación intermedia de su famoso funicular. Allí vive y trabaja Reon Argondian, un excéntrico pintor checo. En cierta ocasión el artista compartió con nosotros algunos de los momentos que más marcaron su vida.