La tecnología está cambiando a toda velocidad la sociedad y también la medicina, lo que a veces redunda en una medicina menos humanista, “en la que el paciente acaba convertido en un cliente para el que muy menudo no hay tiempo ni medios, lo cual no es ético”, nos cuenta el doctor Carlo Bellieni, pediatra neonatólogo de la Universidad de Siena y experto en Bioética.
Nuestro especialista, que ha sido editorialista en L'Osservatore Romano y cuenta además con una profusa bibliografía, recuerda que “todo ser humano, solo por el hecho de haber nacido y estar vivo, ya tiene una dignidad ontológica que, más allá de la moral adquirida, ha de ser respetada en todo momento, también a la hora de ejercer la medicina, tratándolo como en verdad se merece”.