En el 2016, una joven madrileña viajó por primera vez a Pamplona para las celebraciones del día de San Fermín. Nunca se imaginó que a pocas horas de su llegada sus vacaciones se convertirían en una pesadilla al ser atacada por un grupo de hombres y mucho menos que su versión de los hechos y su manera de reaccionar ante ellos serían puestos en tela de juicio Provocando que en toda España hubiera feroces debates sobre la cultura de la violación, el consentimiento y la seguridad de las mujeres en el país.