«El amor nunca falla»
(1 Corintios 13:8, AMP)
El temor al fracaso. Es algo que todos hemos experimentado alguna vez en la vida. La psicología nos dice que debemos hacer cambios para enfrentar ese temor. Pero la Palabra de Dios nos dice que hay una manera de vivir a prueba de fracasos: el camino del amor.
Si quieres conocer el verdadero éxito, deberás aprender a ser movido y motivado por el amor. Eso fue lo que Jesucristo hizo cuando estuvo en el mundo.
Cuando Juan el Bautista fue brutalmente asesinado, Jesús se apartó para estar solo, pero aún en esa hora de agotamiento físico y mental, no se desvió del camino del amor. En Mateo 14:6-14 leemos que cuando Él vio la gran multitud que lo seguía, tuvo compasión de ellos y sanó a los enfermos.
Solía preguntarme cómo pudo Jesús volver la espalda a ese terrible crimen y no tomar venganza. Pero lo que yo no había visto es que Jesús, en efecto, sí se vengó. Él venció las obras de Satanás con la compasión, venció el odio con el amor. Atacó a Satanás en el mundo espiritual al destruir sus obras que producen males y enfermedades.
La compasión no trata las cosas a un nivel superficial, sino que va a la raíz del problema; y por eso siempre triunfa.
Podrías decir: “Un momento, yo no puedo hacer eso; yo no soy Jesús”.
¡Sí, si puedes! Porque la Palabra de Dios dice que el amor de Jesús ha sido derramado en tu corazón (Romanos 5:5). Y 1 Juan 2:5 dice que el amor de Jesús se perfecciona en ti cuando guardas la Palabra de Dios.
Comprométete hoy a vivir una vida de amor. Observa a Dios convertir el fracaso en éxito en tu hogar, en el trabajo y en cualquier situación, porque ¡el amor nunca falla!