EL PAYASO ASESINO:
John Wayne Gacy, conocido también como Pogo el Payaso o El Payaso Asesino, fue un asesino en serie y agresor sexual estadounidense que violó y mató a por lo menos 33 hombres jóvenes, en su mayoría menores entre 1972 y 1978.
John Wayne Gacy nació en Chicago, Illinois en 1942 y falleció en 1994 dejando una trayectoria de asesinatos realizados por el propio personaje que él mismo creó, el payaso Pogo, por lo que se le conoce por el sobrenombre de ‘Pogo’ o de ‘El payaso asesino’, llegando a ser su caso inspiración para el cine y sobre el que se han hecho también documentales.
Se le atribuyen 33 asesinatos, 26 de sus víctimas fueron enterradas en el semisótano de su casa, como después confesaría a la Policía, a quien llegó a entregar un plano detallando donde estaba cada uno de los cuerpos. Al resto de asesinados los enterró en otros lugares y a cuatro de ellos les arrojó al río, según cuenta Alberto Albacete, profesor de Criminología en la URJC, Jefe de Policía Local de Valdemoro y autor de la serie de artículos ‘Mala mente’.
Wayne Gacy fue “un niño acomplejado, bajito, gordito, del que se reían otros niños” y cuyo padre ejercía una fuerte presión sobre él, llegando incluso a pegarle palizas con su cinturón, recuerda Albacete. Su infancia fue difícil porque llegó a sufrir abusos de un amigo paterno cuando tenía tan sólo nueve años. Después, ya de mayor, empezó a mostrar una cierta fascinación por la muerte, de hecho trabajó en una funeraria y “llegó a manifestar su necesidad de dormir con cadáveres”.
John Wayne Gacy, conocido también como Pogo el Payaso o El Payaso Asesino, fue un asesino en serie y agresor sexual estadounidense que violó y mató a por lo menos 33 hombres jóvenes, en su mayoría menores entre 1972 y 1978.
John Wayne Gacy nació en Chicago, Illinois en 1942 y falleció en 1994 dejando una trayectoria de asesinatos realizados por el propio personaje que él mismo creó, el payaso Pogo, por lo que se le conoce por el sobrenombre de ‘Pogo’ o de ‘El payaso asesino’, llegando a ser su caso inspiración para el cine y sobre el que se han hecho también documentales.
Se le atribuyen 33 asesinatos, 26 de sus víctimas fueron enterradas en el semisótano de su casa, como después confesaría a la Policía, a quien llegó a entregar un plano detallando donde estaba cada uno de los cuerpos. Al resto de asesinados los enterró en otros lugares y a cuatro de ellos les arrojó al río, según cuenta Alberto Albacete, profesor de Criminología en la URJC, Jefe de Policía Local de Valdemoro y autor de la serie de artículos ‘Mala mente’.
Wayne Gacy fue “un niño acomplejado, bajito, gordito, del que se reían otros niños” y cuyo padre ejercía una fuerte presión sobre él, llegando incluso a pegarle palizas con su cinturón, recuerda Albacete. Su infancia fue difícil porque llegó a sufrir abusos de un amigo paterno cuando tenía tan sólo nueve años. Después, ya de mayor, empezó a mostrar una cierta fascinación por la muerte, de hecho trabajó en una funeraria y “llegó a manifestar su necesidad de dormir con cadáveres”.