Cuando todo era posible y tenía un futuro por delante pensaba en irme a vivir a Australia. Para mí encarnaba todo lo bueno, lo salvaje, la aventura. Por un lado había canguros y koalas y por otro caimanes y tiburones, desierto, playas, un enorme territorio por explorar y chicas pelirrojas, el paraíso.
Y por otro lado, también estaba la música. Hoy viajaremos por Australia.
Y por otro lado, también estaba la música. Hoy viajaremos por Australia.