En Pere Cervantes descubrimos hace unos años un narrador puro, capaz de contarnos historias que nos atrapaban desde la primera página. Lo hizo con El chico de la bovina. Y ahora nos coloca en 1923. El inspector Basilio Bosc vuelve a Barcelona después de cinco años en Madrid con el encargo de hallar a una niña desaparecida en el cine Coliseum: Cristina Nomdedeu, hija de un importante empresario textil.La novela se titula Me olvidé del cielo. Miguel Ángel Hernández lleva años aproximándose a las imágenes para establecer con ellas un diálogo profundo de arte y vida. El resultado son los textos aquí en Yo estoy en la imagen. Siguiendo la estela de Benjamin, Sontag y Barthes, el autor murciano nos entrega, de la mano de Acantilado, su sabiduría ensayística.Y regresamos a un clásico universal, con múltiples lecturas que nos llevan hasta la actualidad: 1984, de George Orwell.Y Truman Capote, en Palamós.