Hubo un tiempo en este país, como decía la canción de Jarcha, en el que los profesores eran verdaderos dioses, algunos se pasaban un poquito y se les iba la mano con la regla, pero bueno. Sin embargo, la mayoría, como aquel famoso maestro de Crónicas de un pueblo, la mítica serie de Televisión Española de los años, eran y son sabios de todo. Nosotros conocemos uno, que enseña en el pupitre y en la naturaleza, como aquellos intelectuales de la Institución Libre de Enseñanza del gran Giner de los Ríos. Él es Pep Serrarols.